Taller Virtual de Fotografía Estenopeica
por Claudio González
  • Parte II: Toma. Uso de la camera obscura como cámara fotográfica. Armado del laboratorio y revelado de la placa.

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¿De madera? ¿de cartón? ¿de qué material se construyó finalmente su camera obscura?
Hola hola hola, aquí estamos, para continuar con nuestro taller virtual...

En la primer entrega habíamos quedado en que los esperaba con su camera obscura construida, teníamos tres opciones: la “granangular” de 5 cm; la “normal” de 15 cm; y la “telefoto” de 30 cm. Ahora es el momento de… ¡agregarle un estenopo!, recuerde que antes que nada debe usted asegurarse que su caja es perfectamente secreta a la luz, estanca, hermética y que por ningún motivo le entrará luz a su camera obscura, habrá sellado todos los vértices, los rincones, las aristas, todo estará exageradamente pintado de negro mate, toda la caja ciega, ¿si?; entonces podemos continuar, transformar esa aparentemente insulsa caja negra en ¡Cámara Fotográfica Estenopeica!

Consigamos una lámina de aluminio del más fino espesor, bien podemos usar la tapa que traen algunos productos lácteos como el yogur o los quesitos untables, esa tapa la frotamos con un bollo de papel con el propósito de alisarla, plancharla. Seguramente este proceso lo habrá hecho varias veces en su vida con el envoltorio de los alfajores, alisar el papel de aluminio y pintarlo de negro mate, bien pintadito, con dos o tres manos, o con tres o cuatro manos así queda bien pintadito, una vez que se secó cortamos con tijera o trincheta (cutter) un cuadradito de 2 x 2 cm.

Ahora al frente de nuestra camera obscura le practicamos un corte menor, digamos de 1 x 1 cm, bien ubicado en el centro. Para saber cuál es el centro perfecto de nuestro frente de cámara, lugar exacto donde será implantado el estenopo, trazaremos dos diagonales de vértice a vértice y en su intersección ubicaremos el estenopo.

La planchita de aluminio pintado de negro la perforaremos en el centro con una aguja, un alfiler ó, preferentemente con una aguja de inyección de 27 G ½ que se adquiere en cualquier farmacia.

Yo prefiero que usted perfore con aguja de inyección así se va acostumbrando a las medidas de los estenopos, si se entusiasma con la fotografía estenopeica verá que se pone “exquisito” en el momento de practicar un estenopo porque un estenopo bien hecho y del diámetro apropiado nos dará imágenes sorprendentes, las agujas de inyección traen medidas en gauges, las agujas y los alfileres son “aprox.”, sin exactitud de diámetro, además otra ventaja que encuentro para perforar con agujas de inyección es que la punta viene chanfleada, es decir al bies y filosa con lo que si al presionar para perforar la lámina a la vez giramos, quitaremos toda rebaba y nos quedará un agujerito, digo estenopo bien terminado.

Bueno, ya tenemos marcado el centro del frente de nuestra cámara, ya tenemos la lámina con el estenopo, ahora, con la cinta plástica de electricista la pegamos por dentro cuidando que no entre por ningún borde un mínimo de luz, ahora solo entrará luz por el estenopo, una vez adherida la placa con el pequeño agujero, solo por ahí entrará luz, de manera que es necesario obturar el agujerito con el artilugio llamado obturador. Cuando tomemos una fotografía con nuestra camera obscura solo tendremos que descorrer el obturador para dar paso a la luz por el tiempo que determinemos a través de pruebas…

Una sencillísima manera de hacer un obturador es echar mano nuevamente a nuestra cinta plástica de electricista y tapar el estenopo con la cinta. En el momento que tomemos la foto, despegamos la cinta permitiendo de estas manera el paso de la luz… pero entremos en detalles: la cinta, que es toda pringosa, puede dejarnos en nuestro estenopo un poco de esa goma pegajosa que trae, para evitar esto, que nos estropearía el estenopo, cortemos un trocito de esa misma cinta y peguémosla “por contacto” a la altura del estenopo, solo un trocito como para proteger el estenopo del pegote y además cumplirá la doble función de darle espesor lo que la volverá más útil para el propósito.

Otro detalle será cortar la cinta de varios centímetros, digamos cinco, así no tenemos que quitarla entera en el momento de la toma sino que quedará adherida por su extremo así en el momento de cerrar, la tenemos a mano, y si le plegamos sobre sí la punta, nos permitirá tomarla fácilmente sin que se pegue del todo, ¿eh?, detalles.

Este precario obturador nos será útil. Cuando quiera perfeccionar su aparato fotográfico estenopeico podrá recurrir a otro tipo de obturador más complicado de construir como lo son el “de caída” o el “de barrido” o el “giratorio”, por el momento y buscando la mayor sencillez, construiremos el afamado obturador “de cinta electricista”.

Ahora: ¿qué aspecto tiene su camera obscura?, así, con estenopo y obturador ya estamos en condiciones de llamarla Cámara Fotográfica Estenopeica, ¿se anima a trabajar en cuarto oscuro? Como los verdaderos Laboratoristas Fotográficos.

CUARTO OSCURO.

Vamos a acondicionarlo… creo que el lugar más apropiado de la casa es el baño, para armar el cuarto oscuro, por dos importantes razones, una es que el baño es generalmente un recinto pequeño y con poca ventana, es decir, más fácil de oscurecer que el living, por ejemplo. Otra razón es que en el baño hay agua corriente, ahora, los litigios que surjan acerca de las prioridades de uso del baño ya son tema exclusivo de la gente de la casa con lo que yo sugeriría que trabaje usted en el baño pero acomodando nuestros utensilios de laboratorio de manera que también el laboratorio siga siendo un baño, por ejemplo, podemos acomodar las tres cubetas en una esquinita, sobre una mesita de lo más discreta, no precisamos ocupar más espacio que ése, le colocamos una luz de seguridad para laboratorio (recomiendo la Phillips holandesa, ROJA) y entramos al cuarto oscuro con los siguientes elementos: la luz de seguridad ya está colocada y encendida, distribuimos en la mesita o bien en el piso (sí, podemos trabajar en el piso) las tres cubetas en este orden; roja – blanca – verde, acomodamos los químicos en las cubetas: el revelador que le recomiendo para usar con las placas rayográficas y con los papeles fotográficos es el PQ 9 de Romek diluido 1 + 4 que ponemos en la cubeta roja y la tapamos con un cartón así lo cuidamos de la luz, del aire y de que se le caigan cositas encima, después, en la cubeta blanca agregamos agua tibia, solamente agua tibia, y la verde la llenamos de fijador. El fijador que recomiendo para esta tarea es también un producto de Romek, el Romfix diluido como indica el fabricante en el envase: 1 + 3.

¿hasta aquí todo bien? ¿eh?, no se asuste, en la Parte III entraremos en detalles y comprenderá usted qué sencillo es revelar correctamente, ahora le doy “indicaciones al paso” para que se entusiasme enseguida pero… atención que si en lugar de éxito obtenemos fracaso, recuerde usted que está emprendiendo una tarea delicada que a muchos laboratoristas les ha llevado mucho tiempo y varios libros e intentos aprender, sé que contado así como lo cuento parece fácil pero esté atento… muy atento a las reacciones de lo que esté revelando, sea placa o papel y si no obtiene en su primer intentona buenos resultados ¡no se desanime!!!, volvemos a intentar pero esta vez apoyándonos en el conocimiento adquirido en el fracaso… así podremos luego afirmar que hemos fracasado con éxito, porque conoceremos las causas… así que… ATENTO!!!

Considere que el revelador es un producto muy delicado a quien le afecta la luz, el aire y se contamina fácilmente, con lo que para su preparación pondremos especial atención a que todos los recipientes que usemos estén muy limpios y no mezclarlos, de ninguna manera, NUNCA prepararemos fijador en el recipiente que preparamos revelador, NUNCA ni siquiera el olor del fijador deberá acercarse al revelador… Cada cubeta tiene su pinza y éstas NO tienen que tocar otro químico que el propio.

Estas son consideraciones generales, ya entraremos en detalle, ahora que tiene usted las tres cubetas llenas en este orden REVELADOR – AGUA – FIJADOR, sus respectivas pinzas y el revelador tapado, apaguemos la luz blanca, esperemos unos instantes mirando a todos lados a ver si entra luz por algún rincón, a ver si entra algún chiflete… ¡debemos taparlo! Nada, nada de luz en el cuarto oscuro, excepto la luz roja… ¿ya se acostumbro a la roja penumbra? ¿todo bien? ¿podemos cargar nuestra cámara fotográfica estenopeica?. Sí. ¡Sí!.

Entonces con sumo cuidado y prolijidad abrimos la caja de las placas o el sobre de papel, extraemos uno, cerramos perfectamente el envase como estaba y a continuación le colocamos la placa rayográfica o el papel fotográfico a nuestra cámara adhiriéndola con un poquito de cintascoch en los bordes. Esta operación la hacemos bajo la luz de seguridad únicamente. Las placas éstas tienen la emulsión sensible en ambas caras, así que no nos preguntemos de qué lado irá, se la colocamos así, como viene, presionándola con un discreto tramito de cintascoch en varios puntos con la intención de fijarla plana. En cambio el papel fotográfico, que tiene la emulsión fotosensible de un solo lado, ha de distinguirse y colocar ésta mirando hacia el estenopo, con un rulito de cinta en el soporte para adherirla a nuestra cámara.

Tenemos nuestra cámara cargada. Esto se dice así: ¡tenemos nuestra cámara cargada!!! ¡qué emoción!!! Vamos para afuera, vamos a pleno sol, vamos a hacer nuestra primer toma, elijamos un poyete (lugar seguro donde inmovilizar la cámara) y fotografiemos directamente lo que hay delante, esta vez no me importa el sujeto, solo quiero que usted tome esa fotografía y entre a revelar la placa, así que si hay delante de la cámara un auto, un árbol, una pizza, lo mismo da, solo quiero que QUITE LA CINTA – OBTURADOR de delante del estenopo y deje entrar la luz unos segundos… cuente en alta voz: trescientostreinta, trescientostreintaiuno, trescientostreintaidos, trescientostreintaitres, trescientostreintaicuatro, trescientostreintaicinco, trescientostreintaiseis, trescientostreitaisiete, trescientostreinataiocho y ¡ya!, tape el estenopo con la cinta – obturador.

Ya está su primer toma hecha. Si lo desea puede utilizar un cronometro o un reloj común, pero el sistema de los trescientos, o contar elefantes o chanchitos igualmente da resultados, se trata de medir el tiempo de exposición de alguna manera, una vez expuesta la placa, vamos al baño. Quiero decir, vamos al CUARTO OSCURO, abrimos nuestra cámara fotográfica estenopeica, extraemos la placa o el papel con suma delicadeza, esta operación la haremos con la luz ROJA de seguridad, sacamos todas las tiritas de cinta, todo vestigio de su pegote y la sumergimos en el revelador, tomamos la cubeta con ambas manos y la agitamos suavemente sin despegar la vista de la placa... que empieza a transformarse como por arte de magia... pero ya sabemos... la magia es otra cosa; esto es una reacción química llamada REVELADO O REDUCCIÓN, la magia es otra cosa... después de dos minutos, dos y medio minuto aproximadamente, la placa estará revelada, podemos enjuagarla con agüita en la segunda cubeta y luego, así, sin más, la pasamos a la tercer cubeta que contiene el fijador, llamado familiarmente FIX.

Mecemos la cubeta con la plaquita en el fix, durante un minuto, un minuto y medio; la pasamos al agua corriente, si tenía preparado para esto un balde, una buena idea es que un tramito de manguera conectado a la canilla le haga circular el agua de lavado desde abajo hacia arriba, tómese su tiempo y lave profundamente todo material que salga del fix. Cuelgue la placa o el papel con un broche, un gancho o engrámpela en algún borde, deje que se seque a temperatura ambiente, obsérvela “sin meterle lo dedos”, tómela cuidadosamente desde el momento que la extrae de su envase original hasta siempre, hasta la manipulación entre cuba y cuba, hágase de trato delicado y cuidadoso, extreme cuidados con las placas, así como con los negativos o los papeles, protéjalos del polvo...

ADVERTENCIA: NO FUME NI INGIERA ALIMENTOS O BEBIDAS MIENTRAS TRABAJA CON LOS QUÍMICOS

¿Y? ¿estaba lindo su negativo? ¿estaba todo transparente, tal vez? ¿o todo negro? ¿diferencia lo fotografiado?, es decir: ¿existe una imagen negativa de su sujeto? Pregunto, porque de ser así, que en la placa o el papel se ve claramente el sujeto fotografiado, ha obrado usted exitosamente y en nuestro próximo encuentro podrá trasuntar ese cliché “por contacto” sobre papel fotográfico para así obtener su primera foto estenopeica...

Si su negativo o cliché no dice nada; no desesperar... carguemos nuevamente la cámara y ¡otra vez para afuera!, hagamos una exposición más larga si su placa apareció transparente, si su placa está negra, hagamos una exposición más corta... A ver...

Si su placa está transparente y usted a pleno sol fotografió una escena callejera, repita la escena callejera, repita el pleno sol y si contó trescientostreintaicinco, duplíquelo, cuente el doble de tiempo, de esta manera entrará a imprimir su placa el doble de luz, y si por el contrario la placa había salido negra, disminuyamos a la mitad el tiempo de exposición... y si otra vez revelamos y la placa transparente denota alguna leve imagen... ¡doblemos el tiempo de nuevo!, y si salió por el contrario, muy oscura, pero ya no negra, disminuyamos el tiempo de exposición otro poco, y así, de prueba en prueba vamos buscando la exposición correcta.

Envíeme sus dudas, escanee el resultado y hágamelo llegar, lo analizaremos juntos e irá corrigiendo los paso a paso, comprobaremos si el estenopo es el apropiado, pues cada tiraje requiere un diámetro de estenopo distinto. El de 27 G ½ que recomiendo es, digamos, “todo terreno”, pero no es el diámetro ideal para todas las distancias focales, por eso decía al principio que eligiera una distancia focal, este diámetro, de 27 G ½, es apto para las tres funciones; granangular, normal y telefoto, sin embargo, cuando usted ya pretenda resultados límites, resultados correctos, donde todas las cuestiones inherentes a la toma estenopeica estén en juego, veremos de corregir algunos importantes factores como “diámetro ideal de estenopo” y su relación con la distancia focal y sujeto.

Por el momento, yo lo que quería es que se entrenara usted en las técnicas de pruebas, cómo lograr con las pruebas de exposición una buena placa, que la revelara y fijara y bue... creo que por ahora ya tiene bastante trabajo, lo dejo hasta nuestro próximo encuentro donde entraremos en detalles de laboratorio y haremos trasuntado por contacto... esto quiere decir que lo espero, esta vez con un montón de placas cliché reveladas... ¡a ver cómo nos fue!

Envíeme su comentario, hágame saber sus dudas y, si está a su alcance escanear los resultados, sería importante que los fuéramos viendo... Estenopeicos amigos... ¡hasta la próxima!

Si surgiera alguna duda, comuníquese usted conmigo al fotoconceptos@gmail.com que gustoso contestaré sus estenopeicas inquietudes.

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